Viajar solidario es elegir un país donde los habitantes, la fauna o la flora necesiten apoyo logístico y moral... compartiendo tus habilidades y motivaciones. El viaje solidario necesita aprender reglas predefinidas. Puede ser una forma de descubrir nuevos paisajes o lugares cercanos a ti mientras ayudas a mejorar las cosas. De hecho, es posible pasar ►
Viajar solidario es elegir un país donde los habitantes, la fauna o la flora necesiten apoyo logístico y moral... compartiendo tus habilidades y motivaciones. El viaje solidario necesita aprender reglas predefinidas. Puede ser una forma de descubrir nuevos paisajes o lugares cercanos a ti mientras ayudas a mejorar las cosas. De hecho, es posible pasar por una asociación local o una ONG. Sin embargo, a un nivel más individual, tu espontaneidad será suficiente. Conocer a los habitantes y acercarse a las asociaciones una vez allí o antes de partir es una forma igualmente legítima de viajar solidariamente. Tenga en cuenta que hay varias formas de ser voluntario; puedes realizar acciones unas horas al día a tiempo completo, en un periodo más o menos corto, según tus necesidades y las de los locales. Estas dos variables lo diferencian de un viaje clásico. Se necesitarán varios pasos pequeños río arriba y río abajo de la llegada para prepararse mejor para este hermoso viaje. Primero, su pasaporte, vacunas y visa deben estar al día. Una vez allí, si te vas a quedar varios meses en el extranjero, recuerda registrarte en la embajada. Más allá del aspecto administrativo, antes de partir, tómese el tiempo para pensar en las acciones en las que desea contribuir y el material y el conocimiento que podría aportar. Tenga en cuenta que el destino de su viaje dependerá de su sensibilidad, habilidades y conocimientos. Las causas son numerosas y cada país responde a desafíos específicos. Inevitablemente encontrarás tu felicidad. Por ejemplo, Nepal, con su proyecto de reconstrucción post-terremoto. Aunque el desastre ocurrió en 2015, el país aún ofrece misiones de deconstrucción, reconstrucción, albañilería y apoyo a la población. Este tipo de destino es perfecto si tienes habilidades en la construcción y disfrutas del trabajo manual. ¡En Europa hay muchos problemas ecológicos! Podrías participar en misiones de protección de osos en Rumania y Eslovenia. También puedes unirte a uno de los muchos programas de voluntariado ecológico en España o ayudar a servir comidas en los muchos albergues para personas sin hogar en Francia, Alemania o Inglaterra. Además, India es un destino a tener en cuenta si tienes aptitudes para los niños y los idiomas. Los lugareños trabajarán con usted para brindar entretenimiento a los niños, dar lecciones de inglés, brindar tutoría o ayudar a las mujeres en el camino de la independencia social y financiera. Se defiende en Sudamérica la causa de educar a niños con discapacidad; cada año, se traen voluntarios para organizar actividades para estos niños, como huertas. Si es un amante de los caballos y de la vida en la granja, descubra el oeste de Canadá, donde podrá garantizar buenas condiciones de vida para los animales y apoyar al personal en sus acciones logísticas. ◄