Aizanoi, ciudad con restos de gran valor, fue un eje crucial durante la dominación romana debido a su red de carreteras comerciales. Hoy en día, Aizanoi es un tesoro escondido para quienes buscan sumergirse en la historia. El Templo de Zeus, el complejo del Teatro Sade, el Macellum y el Museo Kutahya son sólo algunas ►
Aizanoi, ciudad con restos de gran valor, fue un eje crucial durante la dominación romana debido a su red de carreteras comerciales. Hoy en día, Aizanoi es un tesoro escondido para quienes buscan sumergirse en la historia. El Templo de Zeus, el complejo del Teatro Sade, el Macellum y el Museo Kutahya son sólo algunas de las características únicas que hacen de Aizanoi un destino de visita obligada.
Hagia Sophia es digna de mención en Turquía. Primero se convirtió en catedral, luego en mezquita, luego en museo y hoy vuelve a ser mezquita. La atmósfera espiritual de este lugar y su belleza son singulares. El edificio está revestido con elementos de influencias orientales y occidentales: mosaicos, cúpulas gigantes, un imponente minarete y arcos en el interior, entre otros.
Justo antes de Santa Sofía se encuentra la Mezquita Azul, una estructura bizantina única y reconocida mundialmente. Para que conste, también aparece en las Diez Maravillas del Mundo. Se alza con orgullo en el corazón de Estambul e impresiona por su extraordinaria arquitectura, cuyo exterior consta de más de 20.000 baldosas de cerámica y 260 pequeñas ventanas. También hay seis minaretes islámicos, sin olvidar las treinta cúpulas. En cuanto al interior, es igual de magnífico, con azulejos brillantes con motivos azules y blancos. Además, los viajeros descubrirán que la Mezquita alberga una extensa colección de caligrafía árabe.
Para aquellos que buscan una vista impresionante, nada es mejor que el Palacio de Topkapi, ubicado en la punta del Serrallo. Durante casi cuatro siglos fue la residencia principal de los sultanes otomanos. Como tal, su arquitectura y decoración reflejan grandeza: patios, pabellones, jardines interconectados y el Tesoro Imperial se destacan principalmente durante la visita.
Para el próximo recorrido, los exploradores deberán retroceder en el tiempo porque se sumergirán en el descubrimiento de las ruinas de la antigua ciudad de Afrodita. Estas ruinas, algunas de las cuales datan del siglo III a. C., se han conservado notablemente, lo que permite a los viajeros seguir los pasos de la historia. Las calles de mármol, los teatros antiguos y las magníficas esculturas son testimonio del rico pasado de la ciudad. ◄