En este sentido, Persépolis, la antigua capital del Imperio persa, encabeza la lista de lugares que visitar. Las ruinas indican el poder y la riqueza del imperio, que se revelan principalmente en las estructuras monumentales y las esculturas complejas que han sobrevivido miles de años. Estas reliquias incluyen la Puerta de Todas las Naciones, el ►
En este sentido, Persépolis, la antigua capital del Imperio persa, encabeza la lista de lugares que visitar. Las ruinas indican el poder y la riqueza del imperio, que se revelan principalmente en las estructuras monumentales y las esculturas complejas que han sobrevivido miles de años. Estas reliquias incluyen la Puerta de Todas las Naciones, el Palacio Apadana, la Sala del Trono y el Tesoro. Estas diferentes atracciones son esenciales para aprender mucho sobre la historia de la era persa.
El próximo destino es el antiguo sitio histórico de Pasargadae, en la provincia iraní de Fars. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2004, ofrece a los exploradores la oportunidad de sumergirse en la fascinante historia del Imperio aqueménida y el legado de Ciro el Grande. Aquí es imprescindible detenerse en algunos puntos clave, como la tumba de Ciro, la Puerta de entrada y el palacio de Ciro.
La exploración continúa en Éfeso, que en su época era una vibrante ciudad clásica. Hoy en día, alberga algunas de las ruinas griegas y romanas mejor conservadas de todo el Mediterráneo. Los viajeros pueden caminar por las calles mientras admiran lo que queda de casas, edificios comunitarios, templos y estadios, la biblioteca de Celso, el templo de Adriano y el teatro.
Perge es otro impresionante yacimiento arqueológico cuyas ruinas datan de la época romana. Los restos se encuentran cerca del balneario de Antalya. Los aventureros podrán contemplar las magníficas calles principales con columnas, el estadio romano, el antiguo teatro, los baños romanos, algunas puertas imponentes y numerosas estatuas.
El viaje continúa en Sagalassos, que cuenta con antiguos restos históricos helenísticos y romanos. Tras el paso de Alejandro Magno por la zona, todo quedó prácticamente destruido. Sin embargo, hoy en día, este lugar sigue siendo una hermosa atracción turística, con el anfiteatro, las plazas del mercado, las calles con columnas y la fuente, que todavía se encuentra en funcionamiento. ◄