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El estado de Maranhão está repleto de lugares históricos y parques nacionales. Empiece por pasear por la ciudad de São Luís para explorar sus monumentos. Es la capital de Maranhão, un centro histórico donde los edificios coloniales le embellecerán. La mayoría de los edificios están decorados con azulejos de barro y patrones geométricos.
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El estado de Maranhão está repleto de lugares históricos y parques nacionales. Empiece por pasear por la ciudad de São Luís para explorar sus monumentos. Es la capital de Maranhão, un centro histórico donde los edificios coloniales le embellecerán. La mayoría de los edificios están decorados con azulejos de barro y patrones geométricos.
Pasee por la Plaza Dom Pedro II y aproveche para visitar el Palacio de los Leones o la Plaza de la Lavandería. También puede pasear por la orilla del mar, especialmente por la playa de arena blanca de Calhau. Además de caminar por la costa, también es posible darse un pequeño baño.
No muy lejos de allí, se encuentra el Parque Nacional de los Lençóis Maranhenses, una visita obligada. Un mundo completamente diferente le espera: dunas blancas hasta donde alcanza la vista, intercaladas con lagunas de agua clara. ¡Es simplemente fenomenal! Maravíllese con la Laguna Azul de un hermoso azul cristalino o con la Laguna Verde de un verde esmeralda.
Justo enfrente de São Luís se encuentra la ciudad de Alcântara, antigua capital de Maranhão. Este lugar, fundado en 1648, tiene todo su encanto, con sus calles adoquinadas y edificios de estilo colonial. También puedes pasear por las calles de Imperatriz, una ciudad enclavada en la selva amazónica. Aquí descubrirás la Catedral de Nossa Senhora de Fátima, así como rutas de senderismo cerca del río Tocantin.
No te vayas de Maranhão sin hacer un paseo en barco por el Delta del Río Parnaíba. Se ofrece un panorama de variada fauna y flora, entre las que se incluyen las ilustres ibis escarlatas. ◄