Si buscas aventuras, dirígete a las Montañas Rocosas canadienses. Una vez allí, cruza el Glacier Walk, uno de los caminos panorámicos más bellos del país, y descubre dos increíbles parques nacionales. El Parque Nacional Jasper, hogar del Cañón Maligne, es un gran lugar para practicar senderismo. El segundo, el Parque Nacional Banff, declarado Patrimonio de ►
Si buscas aventuras, dirígete a las Montañas Rocosas canadienses. Una vez allí, cruza el Glacier Walk, uno de los caminos panorámicos más bellos del país, y descubre dos increíbles parques nacionales. El Parque Nacional Jasper, hogar del Cañón Maligne, es un gran lugar para practicar senderismo. El segundo, el Parque Nacional Banff, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, es simplemente suntuoso con sus vibrantes lagos de color azul turquesa.
Un sitio icónico: las Cataratas del Niágara, ubicadas en la frontera entre Estados Unidos y Canadá. Ven a admirarlos en barco y vive una experiencia única.
Si no hace mucho frío, dirígete al norte, a la zona de Yukon, el lugar perfecto para ver la aurora boreal.
¡Una estancia en Canadá no puede estar completa sin una visita a sus ciudades cosmopolitas! La ciudad de Quebec, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, tiene un encanto único debido a su arquitectura y su fuerte identidad cultural. No podrás irte sin ver al menos sus famosos hoteles de hielo.
Inevitablemente le seducirá Montreal, una de las ciudades más multiculturales y acogedoras de América del Norte. Si hay un lugar que realmente necesitas descubrir, ¡es el Parque Mount Royal para obtener una vista panorámica! Vancouver, una mezcla perfecta entre lo urbano y la naturaleza, hará las delicias de todos, ¡incluso de los amantes del esquí! Una vez allí, dirígete a la isla Granville con sus mercados abiertos y prueba productos locales como el famoso jarabe de arce.
Por su inmensidad, Canadá ofrece una increíble diversidad geográfica que hará las delicias de los amantes del aire libre y la naturaleza. ◄