¡Rodeada por el océano, esta ciudad es mágica! Los turistas también van allí para descubrir su apasionante historia, pero también por sus actividades artísticas y culturales. Table Mountain es una de las primeras actividades a realizar con su ascenso en teleférico a casi 1000 metros sobre el nivel del mar. Allí verás el Cabo de ►
¡Rodeada por el océano, esta ciudad es mágica! Los turistas también van allí para descubrir su apasionante historia, pero también por sus actividades artísticas y culturales. Table Mountain es una de las primeras actividades a realizar con su ascenso en teleférico a casi 1000 metros sobre el nivel del mar. Allí verás el Cabo de Buena Esperanza. Luego, los más sibaritas pueden acercarse al Mercado de Barrios para descubrir la antigua fábrica de galletas, hacer algunas compras y degustar algunos platos locales. La playa de Camps Bay, bordeada por acantilados (también llamados los 12 Apóstoles), te invitará a un momento de puro relax sobre su arena blanca y fina. Luego, el recorrido puede continuar en el distrito malayo de Bo-Kaap, donde puedes pasear por las calles adornadas con casas de colores. Para los más fiesteros, vayan a The Long Street. Hay restaurantes, clubes nocturnos y bares que te permiten ver Ciudad del Cabo desde una perspectiva diferente. Después, dirígete al Cabo de Buena Esperanza para descubrir los pingüinos de Boulders Beach, los babuinos y rincones únicos, como False Bay en Muizenberg, donde verás grandes tiburones blancos. Los jardines de Kirstenbosch le permitirán pasar un momento de relajación, pero también asistir a conciertos durante el período de verano. Es posible que te cruces con Johnny Clegg, que suele actuar allí. No te pierdas el centro de la ciudad y el Waterfront, lugares llenos de vida en Ciudad del Cabo. Finalmente, pase una tarde de picnic y observe la hermosa puesta de sol en Signal Hill. ◄