Los montes Apuseni son famosos por su naturaleza excepcional, pero sus pueblos se encuentran entre sus atracciones más populares. En este sentido, nada mejor que empezar por Patrahaitesti. Perdido entre las montañas, aunque Patrahaitesti es pintoresco, solo está habitado por unas veinte familias. De hecho, estas personas han aprendido a vivir en perfecta comunión con ►
Los montes Apuseni son famosos por su naturaleza excepcional, pero sus pueblos se encuentran entre sus atracciones más populares. En este sentido, nada mejor que empezar por Patrahaitesti. Perdido entre las montañas, aunque Patrahaitesti es pintoresco, solo está habitado por unas veinte familias. De hecho, estas personas han aprendido a vivir en perfecta comunión con la naturaleza. Los viajeros que se aventuren allí quedarán maravillados por la paz que reina y el esplendor de los paisajes, con sus verdes prados y montañas cubiertas de abetos. Además, es posible realizar una corta caminata desde Arieseni a través del bosque para llegar al pueblo. Desde un punto de vista cultural, Patrahaitesti permite a los turistas conocer a los lugareños y aprender más sobre sus actividades cotidianas.
La meseta de Padis es un paraíso para los amantes del senderismo. Con una gran variedad de senderos, desde paseos fáciles hasta caminatas desafiantes, hay opciones para todos los gustos. Los exploradores quedarán fascinados por las galerías subterráneas, los serenos lagos y la misteriosa cueva de Podis, que convierten cada paso en una aventura.
En los Montes Apuseni, es muy recomendable visitar las cuevas, consideradas una auténtica obra maestra de la naturaleza. De hecho, la Cueva del Oso impresiona por sus numerosas estalactitas y estalagmitas, y sus formaciones rocosas, cuyas formas pueden evocar castillos, animales o criaturas fantásticas. Quienes la visiten también verán rastros y fósiles del oso cavernario, desaparecido hace más de 15.000 años. La leyenda de la zona cuenta que un centenar de osos se refugiaron allí, pero perecieron tras un deslizamiento de tierra que destruyó la entrada de la cueva. ◄