Cientos de pueblos diferentes poblaron la Tierra antes que nuestro aire, dejando tras de sí el recuerdo de su cultura y saberes. Para conocerlos, inicia tu viaje con la ciudad maya de Ek Bala, en Yukutan en México. Este lugar, la ex-capital del reino de Talol, tiene una antigüedad desde el año 300 JC. Sin ►
Cientos de pueblos diferentes poblaron la Tierra antes que nuestro aire, dejando tras de sí el recuerdo de su cultura y saberes. Para conocerlos, inicia tu viaje con la ciudad maya de Ek Bala, en Yukutan en México. Este lugar, la ex-capital del reino de Talol, tiene una antigüedad desde el año 300 JC. Sin embargo, fue próspera hasta el siglo XVI. Encontrarás el cenote Xcanché, uno de los más hermosos del país. La ciudad, conocida por su fuerza comercial y militar, fue el hogar de casi 20.000 hombres y mujeres mayas. Conocido por su estrecha relación con la famosa ciudad vestigio de Chichén Itzá, Ek Bala brilla a pesar del tiempo. En el lugar, te moverás entre las 45 estructuras que inician el recorrido de 12 km por el Arco Maya. Una vez dentro, visitará, entre otras cosas, el Palacio Oval (un templo y un lugar de vida para la élite maya); el juego de pelota maya; las pirámides gemelas o la acrópolis (la estructura más grande de Ek Balam, donde descansa el gobernante Ukit Kan L't Tok'). Continúa tu aventura por Angkor Wat en Camboya. Entre ellas, Angkor Thom, Bayon, Preah Khan, Angkor Wat, Ta Prohm, etc. Capital del Imperio Khmer, esta ciudad irradió del siglo IX al XV. Este sitio arqueológico consta de 200 templos aún en estado de conservación. El área es omnipresente, tendrá que tomar un medio de transporte para navegar por ella. La elección es variada: coche con conductor, minibús, tuk-tuk, moto-taxi o bicicleta para los más perdurables. China lleva la huella de civilizaciones antiguas, con la única Gran Muralla China. Este titánico edificio está clasificado entre las 7 maravillas del mundo y forma parte del Patrimonio Mundial de la UNESCO. Puedes cruzarlo por Pekín, llegando a los tres tramos mejor conservados y abiertos a visitar: Badaling, Mutianyu y Simatai. Los dos primeros son turísticos, mientras que el último es todavía un poco salvaje. La primera construcción del muro se hizo hace 1400 años, durante la dinastía de Qin Shin Huang, para proteger a China de las invasiones del norte. Desde entonces, ha sido demolido y reconstruido varias veces antes de ser catalogado como sitio protegido. Continuar tu viaje sin pasar por Irán hace posible el encuentro con la civilización persa. Este pueblo, antiguos habitantes del Golfo Pérsico, es conocido por su temperamento conquistador y sus batallas contra los griegos bajo el mando de Ciro. Algunos persas dejaron una huella cultural completa en el país más allá de la guerra. Por ejemplo, puedes ir al mausoleo de Hafez, el mayor maestro de la poesía lírica persa. Este edificio está ubicado en los jardines del noroeste de la ciudad de Shiraz y sigue siendo muy popular. No te pierdas las inscripciones de la tumba; estos son dos poemas de Hafez. El palacio de Karim Khan también brilla en Irán y da testimonio de la arquitectura medieval del país. Éste, encargado en el siglo XVIII por el rey de la dinastía Zand, retoma los principios de construcción de la época: patio rectangular, murallas altas y 4 baluartes circulares con motivos de ladrillo. El sitio ahora alberga un museo con estatuas de cera de tamaño natural que imitan la vida dentro del palacio en el momento de su construcción. ◄